Aqui empezo todo, en una servilleta con Barden

Capítulo 2 Como Barden detuvo el Tiempo

Barden corrió desaforadamente por el Mausoleo del Tiempo, debía detenerlo y paradójicamente no tenía tiempo para hacerlo, su Sueño Roto lo había llevado justo al límite necesario. Al final del Mausoleo se erguía un enorme reloj posado sobre dos relojes de arena que formaban columnas, ahí las arenas del tiempo caían sin cesar impulsando todo.

Barden corre hacia allá tropezándose por las escaleras, al llegar a la base se percata de sus verdaderas dimensiones y naturalmente entiende lo que tiene que hacer, en seguida comienza a escalar hasta la carátula, finalmente se pone de pie sobre el cinco y detiene la manecilla del minutero con todas sus fuerzas.

Ni siquiera el Vagabundo pudo predecir esto, si bien siempre supo que era posible, no lo pudo entender hasta ahora.

En ese momento un colibrí en el Amazonas levanta el vuelo y en lugar de sus regulares 5 mil veces por minuto solamente alcanza unas 300, le cuesta levantar el vuelo y el aire lo empuja en contra de su voluntad; en el Borneo Occidental cerca de Bogonsor un elefante viejo cae pesadamente en un cementerio de elefantes repleto de osamentas, el último latido de su corazón es inusualmente largo porque alcanza a dar dos largos suspiros y mira como una mariposa se posa majestuosamente en su colmillo; mientras tanto Mateo, un niño de 6 años, recoge conchas en la playa cuando siente como el mar se retira inusualmente rápido de sus pies, siente el fragor del silencio y al girar para ver al océano encuentra un muro de agua de unos 6 metros de alto que acecha con golpearlo con toda su furia. Antes de que su corazón palpite de nuevo, emprende la carrera tierra adentro. Mateo jamás olvidará eso, pero con el tiempo pensará que fue un sueño. Al mismo tiempo en el Decano, Jazmín despelleja una toronja mientras Rodrigo la mira, dicho espectáculo raya en el erotismo y se pierde en sus ojos, para él este es un segundo eterno, ni Einstein explicaba así la relatividad del tiempo, finalmente ella, célebre como la Venus de Milo rompe el silencio y le dice: “estás loco”.

Nancy se ha detenido un segundo a ver una revista en el kiosco frente al parque, es demasiado largo el segundo y cuando comienza a caminar de nuevo se detiene a ver el arcoiris sin lluvia que cruza el cielo, ese otro segundo es lo suficientemente largo para que el tranvía que había citado a la muerte con ella pase de largo. Camina al parque justo cuando empieza a llover, saca su sombrilla y camina al lugar donde habrá de esperar a Barden por demasiado tiempo.

Barden ya no puede más. El peso del tiempo sobre sus hombros lo ha consumido y cae rendido convertido en el Barden de 98 años, el tiempo siempre cobra sus deudas. Él se arrastra a la orilla de la plataforma y mira hacía una laguna que nace en la base de los relojes de arena, mira y en lugar de ver su reflejo encuentra a Nancy sentada en el parque donde le esperará por última vez. El tiempo de Barden terminó...

Las Leyendas de la Luna

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Capítulo 2